sábado, 10 de octubre de 2009

Enfoque constructivista en el aprendizaje inicial

El enfoque constructivista representa una nueva concepción de aprendizaje aplicada a la lectura y la escritura. Hemos tomado algunos párrafos del libro de Ancell Scheker, basado una experiencia practica en el país aplicando las teorías Emilia Ferreiro y Ana Teberosky, para contextualizar esto a la experiencia de la enseñanza de la lectura y escritura, abordando las teorías de la psicogenética y la psicolingüística para analizar, más reflexivamente y para determinar de que manera se concebía la escritura. Descubrieron que durante este proceso los niños y niñas pasan por diferentes etapas desde el dibujo como representación de significado, letras y signos como representación del sonido, hasta descubrir el principio alfabético de la escritura. En esta parte nos damos cuenta de que los errores son parte de este proceso de aprendizaje, los educadores deben aprovechar Además se pueden destacar las ideas de Piaget y Vygosky quienes fundamentan a dichas autoras acerca del desarrollo del lenguaje, el pensamiento. Partiendo de estos aportes se ha podido platear la ejecución del enfoque constructivista en la enseñanza de la lectura y la escritura desde una practica distinta.

Ancell Schecker expresa que los niños y las niñas pasan por una serie de conceptualizaciones en el proceso de la adquisición de la lengua escritura, de acuerdo a las autoras Emilia Ferreiro y Ana Taberosky el enfoque constructivista ve la escritura como un sistema de representación para comunicar ideas, experiencias y sentimientos en el cual lo importante es la expresión, la comunicación desde la funcionalidad de la vida cotidiana.Una crítica que se le hace a la escuela tradicional, es la forma de cómo se abordan estos procesos. Considerando que hay una profunda brecha entre la lengua escrita que se enseña en la escuela y la lengua escrita como objeto social y cultural. Por consiguiente, la escuela no enseña la utilidad de la lectura cuando hace que los niños y niñas copien de la pizarra y repitan textos sin sentido. Dice a continuación “en la escuela se crean situaciones muy superficiales para enseñar a leer y escribir; son actividades limitadas, restringidas al libro, imposibilitando el contacto con materiales y textos más interesantes para el niño y la niña.” Esto nos conduce a reflexionar sobre las concepciones que hasta el momento tenemos y la manera de cómo enseñamos.
Existen distintos métodos que se han utilizado en la alfabetización infantil, y la autora los ha clasificados a tendiendo a dos categorías:A) métodos basados en unidades no significativas (alfabético, fonético, silábico y psicofonético); yB) métodos basados en unidades significativas (global, palabras generadoras, frases u oraciones y combinado).

Analizando de manera crítica y reflexiva esto métodos explica lo siguiente:En el primer grupo de métodos el rol docente es protagónico, pues es la maestra quien dirige todo el proceso, el niño no tiene conocimientos, el error es algo que hay que evitar, todos aprenden al mismo ritmo, etc. En el segundo grupo de métodos la maestra organiza y planifica actividades respetando el interés espontáneo de los niños, pero la maestra sigue corrigiendo los errores.En el enfoque constructivista la educadora juega un rol muy diferente, mucho mas activo como colaboradora del proceso de construcción de conocimiento. En el método global y natural se trata de poner a los niños en contacto con la lengua escrita de la manera más natural posible, apoyando los procesos de exploración y expresión que surgen de su interacción con la lectura y escritura.
El estudio realizado por Ancell Scheker partió de un proceso para evaluar los cambios experimentados en los niños y niñas al interactuar con la lectura y la escritura, en tres momentos del año escolar, utilizando para ello un instrumento diseñado para apreciar el nivel en que se encuentra el niño o niña en los siguientes criterios: motivación, participación, interacción con el material y autonomía. En la lectoescritura evaluó varios aspectos sobre la comprensión en la lectura, interpretación de palabras o textos, las ideas y funciones que atribuye a la lengua escrita, intensiones de la lengua escrita según el material, características espaciales de la lectura y de la escritura, la sintaxis, la evolución de los sistemas de escritura, así como las diferentes hipótesis o conceptualizaciones por la que pasan los niños y las niñas en el proceso de la adquisición de la lengua escrita (Pre silábica, silábica, silábica alfabética y alfabética).

Entre las sugerencias y recomendaciones de la autora a los docentes están:
• partir de los conocimientos de los niños y niñas
• reconocer las semejanzas y diferencias en el proceso de escritura
• planificar las actividades de manera flexible
• reconocer la lengua escrita como objeto social y cultural
• realizar actividades significativas

Por lo que es importante realizar actividades que propicien la expresión oral y escrita desde la funcionalidad misma y las necesidades que la vida cotidiana proporciona. La utilidad de la escritura encierra la posibilidad de expresar y comunicar ideas y sentimientos a tener que producir textos con destinatarios, con sentido, con intención en situaciones comunicativas.Este libro representa una joya para los educadores/as, ya que plantea de manera muy clara sus análisis incidiendo en nuestras concepciones de lectura y escritura. Hoy sabemos que no hay un momento para aprender a leer a escribir, pues los niños y niñas desarrollarán sus propias habilidades siempre y cuando vivencien experiencias relativas a la escritura y la lectura como una acción cotidiana y cuenten con un espacio de aprendizaje rico que los sepa guiar en este proceso y también favorezca la comprensión. En fin podemos realizar muchísimos cambios que mejoren nuestras prácticas favoreciendo el desarrollo intelectual de los niños y las niñas y favoreciendo su expresión desde el nivel inicial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario